Los cachorros, cuando son pequeños, no entienden que ladrar está mal, así que hay que educarles. Por ello, en este artículo de la Escuela de Veterinaria de Campus SEAS te contamos cómo enseñar a un cachorro a no ladrar. ¡Sigue leyendo!
Identifica el motivo de los ladridos
En primer lugar, antes de enseñar a un cachorro a no ladrar, es importante que identifiques el porqué de los ladridos de tu perro. Al igual que los humanos expresamos nuestras emociones hablando, ellos lo hacen ladrando, pero tienen que entender que hay límites y que el ladrido excesivo está mal.
Normalmente ladran por algo que les está alterando, como un ruido o un movimiento. En otras ocasiones es por entusiasmo o sobreexcitación. Otras veces será por miedo, soledad, ansiedad o por falta de socialización. En esos casos, le puedes poner solución, como veremos más adelante. En el caso de que sea por alarma, debes observar si tiene algún problema de salud o hay algo a su alrededor que le está perturbando, pues puede que te esté avisando de algo a través de los ladridos.
No grites a la vez que sus ladridos
Un error muy común que cometen muchas personas al intentar hacer callar los ladridos de su perro es gritarles. Normalmente se consigue el efecto contrario, pues el perro piensa que te estás uniendo a sus ladridos y ladra más todavía. También hay que evitar acariciarlo para tranquilizarlo, pues puede pensar que es un premio a su conducta y lo repetirá más veces.
Dale un estímulo desagradable
Para que el perro entienda que ladrar está mal, es fundamental que cuando empiece a hacerlo tenga un estímulo desagradable por tu parte. Por ejemplo, dile en un tono serio que no, así lo asociará con algo negativo y dejará de hacerlo. También puedes usar algo que haga un ruido muy grande y desagradable, como una lata llena de monedas. Cuando finalmente se calle, es fundamental que le acaricies o que le des un premio para que entienda que eso es lo que tiene que hacer.
Evitar los ladridos cuando esté solo en casa
Algunos perros sienten tanta ansiedad cuando se quedan solos en casa que ladran todo el tiempo hasta que vuelves a casa. Para evitarlo, puedes dejarle puesta la tele o la radio para que escuche voces humanas durante tu ausencia. También puedes darle una prenda de ropa vieja para que juegue y pueda oler a tu familia hasta que vuelvas.
Haz que se relaje antes de salir de casa
Los perros ladran mucho cuando salen de casa, ya sea para comunicarse con otros perros o porque tienen miedo de ciertos estímulos como el tráfico u otras personas. Para prevenir que esas situaciones le estresen, conviene hacer que tu perro se relaje antes de salir de casa. Por ello, intenta que no se sobreexcite antes de salir llamándole relajadamente y no abriendo la puerta hasta que lo notes tranquilo.
Y hasta aquí nuestros consejos para enseñar a un cachorro a no ladrar. Y tú, ¿has enseñado a tu perro a controlar sus ladridos? ¿Cuál ha sido tu experiencia? ¡Cuéntanos en comentarios!
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